Un día fui a la farmacia y me dijeron "estás de parabienes, mañana hacemos prueba gratis de Delarom, por tu perfil, creo que te va gustar"
¿Cuál es mi perfil?- pensé yo y lo dije en voz alta. Una persona que disfruta cuidándose, que disfruta de los aromas y las texturas- me dijo la farmacéutica. Buen ojo, le respondí, soy una hedonista. Y al día siguiente, marché a la farmacia.
Si tú, lector o lectora de este blog, eres de esas personas que se relajan con las fragancias naturales, si disfrutas activando tus sentidos, si te da placer cuidarte, creo que una sesión para probar estos productos, es altamente recomendable para ti.
Cuando ingresé a la cabina y vi todo el despliegue de productos, pensé que probablemente volvería a caer rendida, una vez más, ante el encanto de otro laboratorio francés (con la esperanza de que éste me funcionara, claro, no como Vichy que me había decepcionado tanto)
En una sesión de casi media hora, utilizaron varios productos conmigo, los que más recuerdo por el bienestar que me provocaron y el efecto que hicieron en mi piel, fueron la Mascarilla arcilla blanca y el
Bálsamo purificante.
La experiencia fue única, por lo bueno de la misma y porque duró una sola vez.
Ahora haré un tratamiento más prolongado con unas muestras que he solicitado a Delarom y en otro posts contaré cómo es la experiencia a largo plazo con estos productos.
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